Thursday, June 16, 2011

LA BELLA Y MISTERIOSA RUSIA



SEIS AMIGOS ECUATORIANOS LLEGANDO AL AEROPUERTO
DOMODEDOVO DE MOSCU EL 29 DE ABRIL DE 2011

Solo han pasado tres semanas desde que regresamos de nuestro viaje a Rusia y los países bálticos, una fascinante experiencia no solamente por la historia, la cultura, la ciencia, el arte, la música, la geografía , la industria y sobretodo por la política, sino principalmente por su gente, esa maravillosa gente que con su esfuerzo y su creatividad han hecho posible los grandes logros de sus países en beneficio de la humanidad entera, a pesar de que ellos sufrieron muchas guerras a través de la historia, desde sus inicios en el siglo nueve de nuestra era.

En las próximas tres o cuatro entregas de mi blog, les contare a ustedes, mis lectores, sobre nuestra maravillosa experiencia durante las tres semanas que pasamos visitando Rusia, el país geográficamente mas grande del mundo, con 17 millones de kilómetros cuadrados (el doble que los Estados Unidos de América) y habitado por 140 millones de personas (diez veces la población del Ecuador).

Les hago un poquito de historia de nuestro viaje: En septiembre del 2010, Fanny y yo invitamos a tres parejas de amigos a acompañarnos en este viaje a Rusia, viaje que lo haríamos a través de Vatange Travel, una agencia de viajes muy prestigiosa con base en Boston. El tour debería comenzar en abril 28 del 2011 y duraría tres semanas. Una vez que nuestros amigos aceptaron acompañarnos en este viaje, los preparativos para el viaje se iniciaron inmediatamente, y duraron hasta casi el día anterior a la salida de nuestros amigos de Guayaquil, Celso Y Silvia Santacruz y Carol y Yolanda Morales, a quienes se les concedió la visa para entrar a los países bálticos solamente dos días antes de su salida a Orlando para unirse a nosotros y desde allí partir a Rusia. Desde Orlando, los Santacruz, los Morales y nosotros los Romero volamos a Moscú vía Washington D.C., mientras que nuestros amigos de Quito, Fernando y Mercedes Rivera volaron desde Quito a Moscú vía Ámsterdam.


Arribamos al aeropuerto Domodedovo, uno de los cuatro aeropuertos internacionales que sirven a Moscú el 29 de abril del 2011, y, contrario a lo que habíamos esperado y para lo cual estábamos preparados, no hubo mal tiempo, había un sol radiante y la temperatura a las diez y media de la mañana era de aproximadamente 18 grados centígrados. VANTAGE se hizo cargo de nosotros y nuestro equipaje desde el aeropuerto. Después de cerca de dos horas de viaje en bus debido al tráfico de salida de Moscú (pues se acercaba un feriado de cuatro días que los moscovitas aprovecharon para salir a sus dachas en el campo), llegamos a nuestro hotel en el centro de Moscú. Este era el Grand Marriott, un hotel de cinco estrellas donde fue alojado el presidente Clinton en 1999, durante su visita oficial a Moscú. El hotel esta ubicado en una de las principales avenidas de Moscú, la avenida Tverskaya, a solo unos veinte minutos de caminata hasta la Plaza Roja, El Kremlin (sede del gobierno ruso) y la famosa Catedral de San Basilio.

Después de unas pocas horas de descanso que nos permitieron superar en algo el letargo del viaje transcontinental, a las nueve y media de la noche moscovita (con claridad de medio día) nos aventuramos por nuestra cuenta a salir y pasear por las calles de Moscú dirigiéndonos por la avenida Tverskaya en dirección hacia el Kremlin y la Plaza Roja.



FANNY Y RAFAEL FRENTE A LAS MURALLAS DEL

KREMLIN, EN MOSCU, EL 30 DE ABRIL DE 2011

Todos recordamos en esos momentos la bella canción de Charles Aznabour que en los años sesenta su autor cantaba a la linda guía rusa Natalie (¨la plaza roja desierta, delante de mi Natalie…, tenia un lindo nombre mi guía… Natalie”). Mientras caminábamos en la avenida Tverskaya podíamos ver en la iluminada avenida los mismos lujosos almacenes de modas que se pueden ver en la Quinta Avenida de Nueva York, en los Campos Elíseos de Paris o en Westminster en Londres, lo cual era una clara indicación de que Rusia vive una economía capitalista después de solo veinte años de la caída del esclerótico comunismo soviiético que le hizo tanto daño a Rusia y al mundo.

Para los cuatro hombres en nuestro grupo, y muy a pesar de nuestras edades (o quizás precisamente por ello), lo que mas nos impresionaba era la belleza y elegancia de las chicas jóvenes de Moscú, en verdad, comentábamos con evidencias cada vez mayores, que no veíamos viejos en las calles de Moscú y nos costaba aceptar que tal vez éramos los únicos. Las chicas eran mas que hermosas, bellas, mas que bellas, bellísimas; todas de tez muy blanca, altas, de pelo rubio o castaño claro, ojos verdes o azules, tacos y minifaldas muy altos, que resaltaban la belleza escultural de sus hermosas piernas, y todas, absolutamente todas, usando un elegante maquillaje que resaltaba su belleza. A ratos nos parecía que Moscú se había engalanado para nuestra llegada, organizando un desfile de modelos y de modas. Claro la imaginación lo permite todo…

Mientras continuamos caminando, de pronto ya podíamos divisar, a lo lejos, las luces de la Plaza Roja y de las murallas del Kremlin. Era como que un sueño se nos estuviera haciendo realidad, ya que a todos nosotros, en algún momento de nuestras vidas se nos ocurrió que visitar estos lugares iba a ser un hecho normal y alcanzable.




CUATRO AMIGOS ECUATORIANOS

EN LA PLAZA ROJA DE MOSCU, FRENTE

AL KREMLIN Y SAN BASILIO

Tomamos muchas fotos, en nuestro grupo de ocho, los maridos tomaban fotos a sus mujeres, las mujeres tomaban fotos a sus maridos, y todos tomábamos fotos del grupo, todos sentíamos la magia del momento, de estar en un lugar al que muchos quisieran llegar pero pocos pueden hacerlo en sus vidas. Nuestro amigo Carol Morales se compro un gorro de piel como el que usan los cosacos rusos, y se tomo fotos con el. Le vino muy bien esta compra porque al anochecer, a eso de las diez y media, cuando empezaba a caer la noche y la temperatura bajaba a 10 grados, él realmente necesitaba abrigar su cabeza. Mientras caminábamos de regreso a nuestro hotel a eso de la medianoche, empezamos a ver que las calles se llenaban aun mas de gente joven, para quienes la noche recién empezaba, mientras nosotros, cansados íbamos al hotel en busca de reposo. Moscú, como cualquier otra gran ciudad en el mundo capitalista, era en ese momento testigo del movimiento de las masas de jóvenes que se dirigían a las discotecas y centros de diversión, a bailar, a beber y divertirse. Para los jóvenes, la noche recién comenzaba… mientras nosotros ya íbamos directo a nuestras camas, a descansar. Había sido u día muy largo pero hermoso…

Todos nosotros nos sentimos muy contentos de estar allí, de ser parte de nuestro pequeño pero gran grupo de gente que compartía lo mejor de la vida…la amistad en su más pura expresión.

A eso de las diez de la mañana del día siguiente , VANTAGE había preparado un tour de la ciudad para todos los 156 turistas americanos que participábamos en este paseo, con los cuales llenaron cuatro grandes buses de turismo. A nuestro pequeño grupo de ocho ecuatorianos, al que le bautizaron como “grupo Ecuador” se le asignó el bus de la insignia roja, al que se le había asignado un guía turístico ruso de primera, Alexander Kovalenko, profesor de lenguas y de Historia en la Universidad de Moscú.



CUATRO ECUATORIANOS DENTRO DE LAS MURALLAS DEL
KREMLIN, LA SEDE DEL GOBIERNO RUSO

A eso de las diez de la mañana ingresamos en el bus por la entrada sur de la Plaza Roja, por el lado donde se encuentra ubicada la Catedral de San Basilio, con sus gigantescos domos que son un icono y una reliquia de la arquitectura Bizantina Ortodoxa rusa de los siglos 16 al 18, y el templo mas sagrado de la Iglesia Ortodoxa Rusa de los tiempos Imperiales y hasta nuestros tiempos.

Ni la revolución Bolchevique de comienzos del siglo XX (1917-19), ni la violencia antirreligiosa desatada por sus seguidores durante los siguientes setenta años de la “larga noche comunista” que terminó en 1989, tuvieron la valentía para destruir esta obra magna de arquitectura y de fe, que le recuerda al pueblo ruso su amado patrimonio histórico y religioso.

Esa misma noche pudimos ver otra obra magna de la arquitectura rusa, el Teatro Bolshoi, el lugar donde los más grandes artistas rusos del ballet, han sabido mostrar a través del tiempo a su patria y al mundo la grandeza inigualable de su arte. También visitamos la casa donde vivió con su esposa el mas grande poeta ruso de todos los tiempos, Alexander Pushkin, quien a los 35 años de edad murió en un duelo, dejando a Rusia el legado jamás igualado de su grandiosa poesía.





TRES DAMAS ECUATRORIANAS EN MOSCU,

FRENTE A LA ESTATUADEL GRAN

POETA RUSO ALEXANDER PUSHKIN

También pasamos por una serie de monumentos a los héroes rusos de muchas guerras, guerras en que sus hombres dejaron su sangre y su vida para defender a su patria de innumerables agresiones extranjeras, desde los tártaros (que acosaron y sometieron a Rusia por mas de trescientos años), pasando por Napoleón, que llevó su ejercito de trescientos mil hombres(Le Grande Armeé) hasta entrar a la ciudad de Moscú, sólo para encontrarse con una ciudad incendiada y autodestruida por su población (por ordenes del General Kutusov, el comandante del ejercito ruso), hasta los alemanes de Hitler que en 1941 invadieron Rusia, solo para encontrar una resitencia invencible de su valiente y aguerrida población.

También pasamos por muchos puentes sobre el rio Moscú, muchos de los cuales son verdaderas obras de arte arquitectónico, a las que se les han agregado esculturas que les convierten en museos al aire libre para los moscovitas y sus visitantes.

Hicimos también un breve paseo en el Metro de Moscú, una vía subterránea a 50 metros de profundidad, que moviliza más de tres millones de personas al día y en muchas de cuyas estaciones se han colocado obras de escultura y de pintura que les recuerdan diariamente a los moscovitas sobre la grandeza de sus arquitectos, pintores y escultores. Esta obra gigantesca fue construida en la década de los treinta, y sus túneles son tan profundos porque siempre se pensó en usarlos como refugio de la población en caso de guerra. En la segunda guerra mundial, en efecto, estos tuneles sirvieron de refugio para gran parte de la población de Moscú, durante los bombardeos de la artillería y aviación Nazis.

De todos los monumentos, edificios, templos y obras de arte que visitamos en Moscú, es necesario aclarar que (con la gran excepción del Metro), casi todos pertenecen a, o fueron construidos antes de la revolución Bolchevique de 1917, muchos de los cuales han sido preservados por los comunistas, o han sido restaurados después de la caída del régimen soviético, para mostrar su belleza original.

Por otro lado, también pudimos ver algunas de las cosas que construyeron los comunistas soviéticos, entre ellos, una enorme cantidad de edificios que muestran el mal gusto, la falta de criterio y de buen juicio de los comunistas de la era de Stalin, en su intento mal concebido de resolver el problema de la vivienda para la creciente población de Moscú. Son edificios enormes, de cien metros de largo y de cuatro pisos de alto, con departamentos de treinta metros cuadrados, sin cocina, sin baños, sin lavandería, donde debían vivir familias de ocho a diez personas, compartiendo el “lujo de los servicios higiénicos, las cocinas y los baños”, con otros diez o doce apartamentos igualmente sobrepoblados, dando a esta población una vida miserable, llena de angustia y falta de higiene y salubridad. Es solo a mediados de la década de los cincuenta, bajo el gobierno de Nikita Kruschev, que se comienzan a construir nuevos edificios, del mismo tamaño que los anteriores, pero esta vez dotados de los servicios más elementales para una población que nunca se acostumbró a las penurias de sus habitaciones Stalinistas.

La noche del 30 de abril decidimos salir a cenar por nuestra cuenta y solicitamos ayuda a la gente del Servicio al Cliente de nuestro hotel. Nos recomendaron el Restaurant Kitezh, localizado en el sótano de una vieja edificación moscovita cerca del monasterio Petrovsky, en el corazón de Moscú. Este es un restaurant muy conocido de la capital rusa que sirve comida rusa e internacional.



SEIS AMIGOS ECUATORIANOS CENANDO EN MOSCU

Allí nos servimos una deliciosa cena en la que cada uno de nosotros quiso dar rienda suelta a sus preferencias. Unos comimos salmón a la plancha; otros chuleta de cordero a la plancha; otros steak Stroganoff, otros, ternera al vino, en fin, los gustos son variados y no había restricción para ejercerlos. Bebimos vino francés, vodka ruso y otras delicias para la garganta, lo cierto es que salimos satisfechos y felices, habiendo dado rienda suelta a nuestros gustos gastronómicos. De regreso tomamos u taxi para regresar al hotel porque a las diez de la noche comenzaba nuestro paseo de “Moscú por la Noche” en los mismos buses y con los mismos guías.



FOTO DE LA PLAZA ROJA VISTA

DESDE LA CATEDRAL DE SAN BALISIO


Este paseo nos llevo a sitios ya muy conocidos para nosotros, entre ellos, la Plaza Roja, el Kremlin y la catedral de San Basilio, pero esta vez iluminados todos, en preparación para el gran desfile del primero de mayo, fecha muy importante para los rusos desde la época de los soviéticos.

Para el siguiente día, que era un día de fiesta nacional en Rusia y las calles de Moscú iban a estar llenas de gente mirando los desfiles de gremios de trabajadores y de estudiantes, habíamos escogido tomar un paseo opcional al gran Monasterio de Kirillo-Belozersky, el mas antiguo, mas grande e históricamente mas famoso monasterio ortodoxo de toda Rusia, situado a una hora de viaje en el bus de VANTAGE. De eso hablaré en mi próxima entrega.





ALGUNAS VISTAS DE LA BELLA CAPITAL RUSA

A continuación incluyo una breve descripción de Moscú, tomada de Wikipedia, la biblioteca de Google:

Moscú es la capital y la ciudad más populosa de Rusia y de toda Europa. Es un gran centro político, económico, cultural, científico, religioso, financiero y educacional y además el centro del transporte ferroviario de toda Rusia. Es una de las ciudades importantes más septentrionales de la tierra, con una población de aproximadamente 14 millones de habitantes que la convierte en la sexta ciudad más grande del mundo.

Moscú esta situada a las orillas del Rio Moskva (Moscú), en el centro de la Rusia Europea. En el curso de su historia, esta ciudad ha sido la capital de una serie de estados, desde el Gran Ducado de Moscú y los subsiguientes estados gobernados por los zares, la Unión Soviética y la actual Federación Rusa, heredera del estado soviético. Moscú es la sede del Kremlin, una fortaleza antigua que es ahora la residencia de la rama ejecutiva del gobierno de Rusia. Las dos cámaras del parlamento ruso (la Duma y la Cámara de la Federación) también tienen su sede en Moscú

La ciudad es el centro de una extensa red de transporte que incluye cuatro aeropuertos internacionales, nueve terminales ferroviarias (el ferrocarril es el principal medio de transporte ruso), y del famoso Metro de Moscú, segundo en el mundo (después del de Tokio) en el numero de pasajeros que transporta diariamente, y por la variada y artística arquitectura de sus 182 estaciones.